Facebook

Translate

domingo, 29 de noviembre de 2015

Muchas Gracias






Muchas gracias a todos por haberos tomado la molestia de opinar.




Como ya me habéis comentado muchos de vosotros, está un poco confuso, porque realmente no es exactamente una votación como tal.
A los médicos si nos mandan un formulario específico,  pero para los pacientes es un poco más complicado, hay que entrar el el portal , registrase y emitir una opinión.
Un poco rollo, pero se tarda poco, creo, y por supuesto es gratuito.

http://www.doctoralia.es/medicos/especialidad/pediatras-1041

Al final el premio es lo de menos, pero el feedback es muy importante, al menos para mí, no sólo lo bueno sino también lo malo o menos bueno, es un aliciente apara mejorar las cosas.
Igual que hacemos con Hoteles, Restaurantes y Tiendas como Amazon, también deberíamos entrar en portales como este o similares (hay un montón)  para opinar sobre nuestros médicos, fisioterapeutas...
 Al final ayuda a los clientes/pacientes a elegir mejor y a los profesionales nos sirve para mejorar cada día el servicio que ofrecemos.
 Muchas gracias a todos, estoy emocionado, especialmente porque la mayoría sois madres con cero minutos libres al día y menos por la noche.
Quería escribir esto para los que os habéis tomado la molestia pero no os puedo agradecer personalmente. Muchas gracias otra vez, y os animo a usar  este tipo de recursos no sólo en esta ocasión sino siempre.
Aunque lo agradezco igualmente. os pediría que sólo hicierais valoración los que conocéis mi trabajo directamente de una forma u otra, para no restar seriedad al proceso.
Si tenéis otro médico que os parezca recomendable deberías hacerlo, los médicos agradecemos mucho estos gestos.






                                                               Yo no quiero dormir como un bebé.  
                                                                Me conformo con dormir como mi marido 




PD: para lo que os habéis confundido y simplemente habéis dado un like, no estáis procastinando,   el proceso sigue abierto, je, je.
Un abrazo  a todos

lunes, 23 de noviembre de 2015

Bronquiolitis, niños y enchufes.

Aunque el título es un poco chocante, ya veréis que acaba teniendo sentido.



                                                             ¡Los enchufes no se tocan! 


Este fin de semana han bajado las temperaturas bruscamente y ya ha llegado el momento tan temido por todos los pediatras cada final de otoño: la epidemia de bronquiolitis aguda por el Virus Respiratorio Sincitial, el  VRS para los "amigos".
Otro día hablaremos más sobre el tema, hoy algo muy simple sobre el tratamiento.
NO HAY TRATAMIENTO EFECTIVO (aunque con algunas matizaciones de las que hablaremos  otro día).
Tan sólo tratamiento de soporte (oxígeno, fluidoterapia, soporte ventilatorio, fisioterapia  y tratamiento de las complicaciones en los casos más severos). Y este tratamiento de soporte no es poca cosa ; aunque nos parezca frustrante muchas veces, la verdad es que salva miles de vidas.
En países pobres, menos afortunados que nosotros, decenas de miles de niños mueren cada año por la bronquiolitis aguda y sus complicaciones.
En España esto es excepcional, aunque por desgracia si hay casos graves, sobre todo entre los bebés más pequeños, especialmente los menores de tres meses. 



                                
¿Y entonces no podemos hacer nada? Pues sí, podemos hacer los más inteligente que hay en Medicina, especialmente cuando no hay un buen tratamiento. PREVENIR.
El VRS es un virus muy muy contagioso, sobre todo porque puede permanecer vivo y contagioso en todos los objetos que nos rodean durante horas. Si a eso le sumamos que los humanos nos tocamos la cara (nariz, boca y ojos) de forma inadvertida innumerables veces al día (algunos con alevosía, sobre todo en los semáforos y  atascos), te puedes hacer una idea de la situación.
Lo que para un niño mayorcito o un adulto es un fuerte resfriado de otoño, para un bebé puede ser un drama. Y es tan fácil (o tan difícil) de evitar como seguir una simple norma:
Al bebé no le toca nadie, salvo su mamá (necesaria), su papá (prescindible salvo que ayude) y ocasionalmente las abuelas (no queda más remedio, je,je).
Y todo el mundo se lava bien las manos antes (recordar al pobre Doctor Semmelweis) .
Y ni la vecina tan simpática (pero que tiene doscientos niños con mocos) ni tu cuñada (que no es tan simpática, pero tu disimulas fenomenal) mete mano en la cuna para tocar a tu hijo y decirte lo guapo que es. Nadie. 
Se que suena un poco radical, pero es lo único que funciona. Y lavarse la manos. Y evitar que la gente hable o tosa a menos de un metro de la cuna de tu hijo. Y prohibir las dos millones de innecesarias visitas a la maternidad a visitar al pobre recién nacido y su madre.
Y ahora viene lo más difícil, los hermanitos pequeños, virus con dos patas y apariencia humana.
-Intentamos que no lo toque, pero eso es imposible- dicen todos los padres con sonrisa resignada.
Pues no estoy de acuerdo. Los niños pequeños son pequeños, pero no son tontos, y aprenden todo los que les enseñamos. Y lo mismo que aprenden que los enchufes no se tocan, aprenden a no tocar al bebé. Y si les prestamos suficiente atención, con cariño y mano izquierda, ningún príncipe destronado se va a traumatizar ni va a querer menos a su hermano.
No funciona así, aunque los adultos creamos lo contrario.
Y el pequeño neonato o lactantito de 1-2 meses ni te imaginas lo feliz que está en su mundo de dos, prescindiendo del resto del Universo.
Se que suena exagerado, admito que pongo muy pesado con este tema y lo repito sin cansarme en la consulta, en el Hospital, en Urgencias, con mi familia y amigos...
Pero he tenido que intubar a más pequeños con bronquiolitis de lo que me hubiera gustado.Y se ponen muy malitos Y se puede evitar.
Y da mucha pena ver lamentarse a unos padres delante de su hijo en estado grave que no sabían nada, que ojalá alguien les hubiera dicho algo, que como iban a imaginar que un catarro tontorrón iba a acabar en esto...
Así que hacerme caso por favor. Los bebés son enchufes a todos los efectos, sobre todo los menores de 6 meses, durante los meses de Noviembre a Marzo.Y los enchufes no se tocan.
Me gustan pensar que todos los años algún  bebé  no se coge la dichosa bronquiolitis gracias a lo pesado que soy.

Las cosas buenas que trae el frío.


 











                Valle de  Arán. España. 


sábado, 14 de noviembre de 2015

Problemas suministro nueva vacuna Meningococo B

Como habéis podido comprobar muchos de vosotros, hay problemas de suministro de la nueva vacuna (Bexero) contra el Meningococo B  en las farmacias.
La causa no es otra que un exceso de demanda sobre los cálculos iniciales del laboratorio que fabrica la vacuna. No solamente es España, sino en todo el mundo.



                                                    Jamie Lee Curtis recrea el mítico fotograma de   la película               
                                                    Psicosis (1960)  protagonizada por su madre Janet Leigh.                

Las vacunas requieren de un laborioso proceso de fabricación sometido a muchos controles de calidad que se prolonga a lo largo de varios meses. Así, el margen de producción es poco elástico y no le permite adaptarse a las condiciones del mercado con la rapidez que nos gustaría.
Algo parecido ha ocurrido con las vacuna de la tos ferina. 
El laboratorio fabricante está trabajando en ello por la evidente cuenta que les trae, y probablemente tendremos la vacuna en los próximos meses.
Entre tanto, la política de las autoridades sanitarias es favorecer la vacunación de los niños que ya han iniciado la vacunación y la de los colectivos de riesgo
Esto, que sin duda es un contratiempo, no debería generar el pánico que he observado.







No estamos en un brote epidémico, y la enfermedad afortunadamente es muy poco frecuente.
Sin duda los pacientes que enfermen hasta que la vacuna esté disponible serán casos muy desafortunados, sobre todo si tenían previsto vacunarse; pero hay que ser razonables y no perder la calma. Hemos estado toda la vida sin disponer de esta vacuna y ahora vamos a tener que esperar unos pocos meses. No podemos perder la cabeza, las condiciones de la enfermedad no han cambiado, estamos igual que en septiembre de 2015, antes de conocer la buena noticia de la liberalización de la distribución de la vacuna.
Hay que asumir que el riesgo cero no existe; por mucho que queramos proteger a nuestros hijos, no podemos controlar todas las variables. Hay que intentar hacer las cosas los mejor posible, pero no podemos perder la calma.
Como en toda mala noticia, siempre podemos encontrar algo positivo. Yo destacaría tres aspectos:

1) La fuerte demanda es muy buena noticia, y no sólo para los accionistas del laboratorio. Una vacunación masiva nos ayudará a salvar vidas y poder casi erradicar una terrible enfermedad.

2) En mi opinión, noticias como esta deberían destacar la seriedad del proceso de fabricación de vacunas, que por sí solo desarma muchos argumentos de los antivacunas más conspiranoicos.

3) Aunque parezca una tontería, nos permite ahorrar un poco para el importante desembolso que supone la vacuna, sobre todo en la familias numerosas. Teniendo más tiempo para planificar el gasto, evitará a muchas madres tener que decidir a cual de sus hijos vacuna antes, no todo el mundo tiene el dinero que necesitaría y ya sabemos que las madres siempre se sienten muy culpables con estas cosas.
A continuación hago "cortapega" de un correo que me ha enviado la Sociedad de Pediatría de Madrid y Castilla la Mancha.

Nos notifican de GlaxoSmithKline, actual laboratorio fabricante y distribuidor de la vacuna antimeningocócica B (Bexsero®) liberada, desde 1º de Octubre, de su “uso hospialario” a la “libre prescripción médica” que: a partir de ese momento, por la inesperada demanda, ha sido preciso hacer una distribución controlada de las dosis disponibles.
Debido a su largo proceso de fabricación, calculan que se podrá afrontar completamente  toda la demanda en España hacia el segundo trimestre de 2016. 
Hasta entonces, se seguirán distribuyendo las dosis necesarias para completar la pauta (IMPORTANTE; basada en la ficha técnica) de sujetos que hubiesen iniciado su vacunación previamente. Igualmente para aquellos pacientes considerados por la autoridades sanitarias como de mayor riesgo de sufrir una enfermedad meningocócica (déficit de properdina o del complemento (C5-C9 o factor D), asplenia o disfunción esplénica grave (drepanocitosis), personal de laboratorio potencialmente expuesto al patógeno, enfermos tratados con eculizumab y sujetos que hubiesen padecido un episodio de Enfermedad Meningocócica Invasora), quedando garantizado su suministro, así como para la demanda que pudiera generarse si surgiese un eventual  brote de la enfermedad en la población.




jueves, 5 de noviembre de 2015

Manos limpias y los niños

No es un nuevo titular sobre corrupción, tan de moda últimamente. Es algo mucho más importante.
Cuando era estudiante de Medicina me hablaron del pobre Doctor Semmelweis, historia que me impresionó profundamente.

                                                                      
                                                                          Ignaz Philipp Semmelweis 1818-1865 

Este insigne obstetra nacido en Budapest hace casi 200 años, hizo una brillante observación; los recién nacidos procedentes de partos domiciliarios tenían una tasa de infección mucho menor que los nacidos en el hospital. Y en su hospital la mortalidad era mucho menor en la sala atendida solo por matronas que en la que era atendida por estudiantes de medicina.
Lo documentó con datos y además se preguntó por qué podía ocurrir. También observó que cuantos más médicos y estudiantes trataban a las parturientas, más probable era la infección en el hijo y la madre. Y si además habían estando realizando autopsias o cirugías, estas  infecciones eran todavía más frecuente.
Y sí, el pequeño detalle que ahora nos parece increíble,es que los médicos no usaban guantes ni se lavaban las manos; hago una autopsia, dreno una absceso purulento y luego te saco a tu hijo; así, del tirón y sin lavarme las manos y por supuesto sin anestesia (literalmente). Me pareció tan alucinante que nunca he olvidado la historia. Que por cierto,  no acaba aquí.



                                                                   Etiología, concepto y profilaxis de la fiebre puerperal.
                                                                   Semmelweis. 1861.


El bueno de Semmelweis, ejemplo perfecto del médico brillante y científico, estudio minuciosamente los datos, los probó, documentó, apunto hipótesis causales e intento implementar una medida tan sencilla como el lavado de manos antes de un  procedimientos médico. Y además pudo probar que la medida era muy efectiva, y muchas vidas se salvaban. Incorporó el uso de la estadística a la investigación médica.
Entrábamos en la era de la medicina moderna, la higiene y la asepsia, unos años antes de que se descubrieran los gérmenes.
Al buen doctor no sólo no le premiaron por sus descubrimientos sino que le despidieron y sus propios compañeros le amargaron la vida. Era intolerable la simple insinuación de que esas muertes eran causadas por los propios médicos. Recuerdo cuánto me indignó esa historia, ¡que injusticia!
 He leído que murió demenciado por una probable neurosífilis y víctima de una sepsis que el mismo se provocó, en una patético intento de probar su teoría.
Paralelamente, otros médicos llegaron a conclusiones similares y se abrió una nueva etapa  en la historia de la Medicina.
Pero nadie se acuerda del buen Doctor. Hace unos pocos años han surgido varias iniciativas para recuperar su memoria por parte de  instituciones tan importantes como la OMS (Organización Mundial de la Salud).
Ninguna medida tan sencilla como el lavado de manos ha salvado tantas vidas a lo largo de la historia, y muchas más que se podrían salvar todavía en la actualidad; porque aunque te parezca increíble, todavía queda mucho por hacer, tanto en el estamento sanitario como en la población general.
El próximo día hablaré de como afecta todo  esto a tÏ y a tus hijos.

PD:  Dedicado al padre de mi pacientito Ignacio y a todos los que se tiene que pelear hoy en día  para que a sus hijos pequeños no les toque nadie  sin haberse lavado las manos previamente.